Durante su intervención en la reunión de alto nivel sobre la implementación de los objetivos y metas de la Agenda 2030 relacionadas con el agua, en el marco de la Asamblea General de las Naciones Unidas, el Canciller Rogelio Mayta, en representación del Estado boliviano, convocó a los países del mundo a rechazar cualquier acción que pretenda mercantilizar el agua, y a garantizar la defensa del acceso al líquido elemento y al saneamiento como derecho humano.
“En esta ocasión, expresamos nuestra preocupación por todo intento de comercializar el agua en el mercado de futuros del Wall Street, suscitado a fines de 2020- Esta acción considera al agua una mera mercancía, yendo a contramano de la resolución del sistema de Naciones Unidas que la declara como derecho humano, estableciendo un riesgoso precedente”, manifestó este lunes 22 de marzo, Día Mundial del Agua.
Mayta recordó que Bolivia es un país que marcó la historia a nivel mundial con la denominada “Guerra del agua” el año 2000, que rechazó un intento de mercantilización y privatización de los servicios de agua y saneamiento, posición nacida de lo más profundo de la conciencia popular, del espíritu de los pueblos originarios; hecho que llevó a Bolivia a promover en distintos escenarios internacionales la declaratoria del acceso al agua y al saneamiento como derechos humanos.
“Hoy y aquí, ratificamos nuestra posición compartida por los pueblos del mundo en la Asamblea General del 2010 y por el Consejo de Derechos Humanos el año 2011, y reivindicamos el derecho de las mujeres y hombres del mundo a tener acceso a agua y al saneamiento en cualquier lugar de nuestro planeta, más allá de sus credos, color de piel y sin ninguna discriminación”, subrayó el Canciller boliviano.
El Día Mundial del Agua se celebra cada 22 de marzo para recordar la relevancia de este líquido esencial. A pesar de que todas las actividades sociales y económicas dependen en gran medida del abastecimiento de agua dulce y de su calidad, 2.200 millones de personas viven sin acceso a agua potable. Esta celebración tiene por objetivo concienciar acerca de la crisis mundial del agua y la necesidad de buscar medidas para abordarla de manera que se alcance el Objetivo de Desarrollo Sostenible No 6: Agua y saneamiento para todos antes de 2030.
Fuente: Viceministerio de Comunicación